Aprieta fuerte mi mano para sentir mi pecho ardiendo,
que tengo ganas de llevar mi corazón hasta tu cuerpo;
aprieta mi mano fuerte y no me sueltes nunca, jamás,
que necesito de tu presencia, tu mirada, tu aliento...
Abrázame muy fuerte, también, para meterme en tu pellejo;
deja que pueda por unos minutos, navegar en tus sentimientos
para no quedarme nunca lejos y llenar de ti, mi corazón sediento.
Déjame amarrarme a tu cintura, que te abrace todo entero,
y que me quieras, y que te quiera como te estoy queriendo;
y deja que los días que estamos pasando cerca, uno del otro,
nos embriaguen, nos alimenten el amor y nos lo sellen eterno.
(A mi cielo J.V.M) TQM
que tengo ganas de llevar mi corazón hasta tu cuerpo;
aprieta mi mano fuerte y no me sueltes nunca, jamás,
que necesito de tu presencia, tu mirada, tu aliento...
Abrázame muy fuerte, también, para meterme en tu pellejo;
deja que pueda por unos minutos, navegar en tus sentimientos
para no quedarme nunca lejos y llenar de ti, mi corazón sediento.
Déjame amarrarme a tu cintura, que te abrace todo entero,
y que me quieras, y que te quiera como te estoy queriendo;
y deja que los días que estamos pasando cerca, uno del otro,
nos embriaguen, nos alimenten el amor y nos lo sellen eterno.
(A mi cielo J.V.M) TQM
4 comentarios:
Hola Maribel bello poema el que desglosa tú fina pluma donde expresa el amor y el romance
en esa bella imaginación y la magia de las palabras con que escribes tus poema en esa madrugada romanticas te felicito fue un placer Para mi Leer y recorrer tu sentir un abrazo en la distancia
Su amigo..
Ángel de Amor
Gracias Rodolfo.
Espero que sigas estando entusiasmado con mis letras, porque eso significaría que he seguido haciendo palpitar algunos corazones, en este mundo de seres poco sensibles.
Bueno es; que aún quedemos unos cuantos.
Maribel: es bello compartir contigo todas tus madrugadas, tus poemas, tus palabras, tus momentos, y ser recompensado con tu amor tan limpio, romántico, embebiendo mi alma con tu grandeza, acariciando con dulzura mi llanto emocionado por haberte encontrado en mi camino. Gracias por ser mi compañera, mi amiga, mi vida, por dejar que el contorno gaseoso de mi aura enamorada, incandescente, se fusione con la danza que tu alma incólume en esencia, de mujer, me entrega en cada instante de su vida para que juntos compongamos una oda al amor en su máxima extensión. TQM, MARIBEL. TU J.V.M., Juan Vecino Manibardo.
Querido Juan, eres la estrella que más fuertemente brilla en mis noches y eres el sol que ilumina mis mañanas, ¿qué decirte que no sepas?
Sólo me quedará darte mi amor hasta que me derrita entre tus brazos con el paso del tiempo en mi vida, sólo me queda dejar que me sientas, sólo me quedan caricias y arrumacos en las tardes de verano y abrazos en invierno y canciones al amanecer, poemas en la madrugada y mucha ilusión, juanto a ti, mi niño.
Gracias por estas hermosísimas palabras que me has escrito desde tu tierno corazón, de ese gran corazón que acompaña al alma que dejas brotar cada segundo de tu vida, y esas miradas que me hacen llorar de alegría al sentirte cerca.
Eres el duende, insensato y desatado que me martiriza día y noche en busca de sentimientos profundos y me saca un canto al amor para publicarlo eneste blog.
Gracias Juan, te lo digo a menudo, pero es que me has hecho ver la vida en colores muy intensos y me has coloreado el paisaje que estaba en blanco y negro.
Besos de esta sierva del amor, de esta mujer que conociste un día y que sigue a tu lado, y seguiré...
Besos de Maribel Jiménez.
¡Te quiero, grandullón!
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