sábado, 9 de enero de 2010

TODOS TENEMOS ALGO QUE CONTAR...




Sin abrir la boca casi, me ha contado el cajero del supermercado algo que me ha erizado el vello. Casi se me llenan los ojos de lágrimas. La conversación vino a cuento porque agué la caja de seis litros de leche, cuyo destino era la casa de mi madre. En mi conversación dije que no iba a aceptar ni un euro por esa leche porque bastante me habían dado ya a mi, desde que nací...

Enseguida me asaltó él con una frase que me quedó helada.

Dijo que no podía pagar a su madre todo lo que había hecho por él, que entre ellos había un lazo muy fuerte y una unión increíble. Yo me mantuve mirándole a los ojos porque me sorprendieron sus palabras y luego le pregunté que por qué no le podría pagar, que si había fallecido. A lo que me continuó explicando que no, que su madre era viuda desde los 31 años.

¡Qué bonito!Me hablaba de esa especial unión con ella. Que la adoraba. Y así, ni me acordé de firmar el tique de la compra. Me desplomé por un segundo y quise hacer una lectura rápida de lo importante que es una madre para un hijo y deseé con todas mis fuerzas que el mio me respondiera con la misma moneda, porque eso diría de mi que he sido lo máximo para él. No por serlo, sino por el hecho de que sienta en su madre esta especial sensación que el cajero del centro comercial me ha transmitido en una conversación de perfectos desconocidos.

Me voy a ir a la cama pensando que todos y todas tenemos una historia detrás de nosotros mismos, que es muy posible, que queramos contar, a veces, hasta gritar si estamos emocionados con ello. Todos queremos comunicar lo que somos, lo que estamos viviendo, lo que hemos vivido y no veo la necesidad de quemar ni un solo segundo de nuestras vidas, porque el libro que escribimos desde que nacemos, se llama nuestra historia personal e intransferible y si le quitamos alguna hoja o algún capítulo, el libro estaría roto.

En este post, me gustaría que me contaseis alguna anécdota que os haya ocurrido que os haya causado alguna sensación especial, que os haya llamado la atención o que simplemente os acordéis en este momento y la queráis compartir. Con ello, iremos publicando nuestras historias, que serán motivo de recuerdo de otras en otras personas que las lean.

Gracias por vuestras aportaciones.

Como siempre, escribid con el corazón, que es lo que aflora los sentimientos que tenemos encarnados y los debemos dejar fluir.

Maribel Jiménez, como siempre, en este blog.

1 comentario:

Conce Méndez dijo...

Hola guapa...pues hoy descubrí que alguien me dedicó un comic..ains Maribel... tu sigue contando tus iluisones, y sigue tan dulce y soñadora, eres un encanto de mujer.

Besitos.

"...¡un pedacito de mi alma
escrito a golpe de tecla
de ordenador...!
(Maribel Jiménez)
"...¡Espero que en el año 2011
seas capaz de seguir soñando
y cada una de esas ilusiones
se vean cumplidas en tu alma bella... "(Maribel Jiménez)